Comentario: Puerto Rico necesita a su gente

Puerto Rico es reconocido por su encanto. Pero, ¿cuál es? aunque puede parecer lógico concluir que se debe a su privilegiada localización geografica por ser una isla rodeada de playas hermosas y campos relajantes en donde se escucha el cantar del coquí. Nada sería igual sin el puertorriqueño. La personalidad "borikua" es una sin igual. Sería completamente extraño vivir en una isla donde las ancianas no te hablan durante la espera en una fila para ser atendido, la gente comienza a bailar al escuchar música salsa en un negocio pequeño. Donde la alegría es un hábito y lo más mínimo te hace sonreir. Puerto Rico es su gente y sin su pueblo, solo sería como una casa linda por fuera, pero vacía e incompleta por dentro.

Es imposible no sentir nada al observar como miles de puertorriqueños se ven forzados a mudarse fuera de la isla. Muchas personas que se van, lo hacen con fé de poder regresar una vez las cosas se vayan "normalizando" en el aspecto económico y político. 

Es sumamente doloroso tener que dejar a sus familiares atrás en búsqueda de una mejor vida, una llena de oportunidades de superación. 

Con el costo inflado de vida y trabajos que no pagan lo necesario para vivir cómodamente, poca cantidad de médicos en una isla donde el sector más grande es el de edad avanzada, criminalidad descontrolada, casos de corrupción constantes, inundaciones frecuentes y pobre infraestructura, es prácticamente imposible mantenerse en un lugar cuyo futuro es uno incierto y preocupante.

Es de suma importancia que el pueblo puertorriqueño tenga conocimiento del descenso poblacional que hay en la isla. Identificar los elementos que contribuyen a esto ayuda a desenmascarar las realidades crudas que vivimos como pueblo. Si uno se familiariza con las problemáticas de la isla, se puede combatir el transcurso inevitable en el que nos dirigimos. Aveces con un poco de optimismo y cooperación, grandes cosas se pueden lograr. Aunque sea difícil visualizar a la isla prosperando, considerando las realidades que enfrentamos hoy día, la fé es lo último que debemos perder.

Un pueblo unido es uno que logra el progreso. Quizás nos sentimos que no hay más remedios para salir hacia adelante, pero en la unión esta la fuerza. Antes de saltar a conclusiones, es menester poder buscar todas las caras de la moneda con respecto a cualquier asunto para así poder tomar decisiones y formular opiniones informadas.

Es nuestra responsabilidad educarnos sobre temas que nos afectan a todos, y el descenso demográfico definitivamente es uno.